Buscar este blog

domingo, 17 de enero de 2021

4 Cosas que mejoraron mis finanzas personales después de la pandemia

Buen día mis muy estimados lectores, 

Cómo lo mencioné en la entrada anterior, una de las grandes reflexiones que tuve durante el tiempo que nos quedamos encerrados en nuestras casitas durante la pandemia de Covid-19 en el 2020 fue acerca de mis finanzas personales. 

Hace muchos años leí el libro de Sofía Macías "Pequeño Cerdo Capitalista" y me hizo mucho sentido; tomé algunos tips del libro: Llevar un registro de cuentas, entender cómo funciona la tarjeta de crédito, hacer mi presupuesto... etc... Debo decir que el libro es excelente y definitivamente se los recomiendo (de hecho compré otra copia durante la pandemia por que el mío se perdió en alguna de las tantas mudanzas que he tenido). 

Sin embargo, aunque sabía cómo funcionan las tarjetas de crédito, seguí pagando un montón de intereses por wey (ni pex, hay que decirlo); no sabía a dónde se me iba mi dinero, no tenía fondos de emergencia, prácticamente iba sobreviviendo de quincena a quincena, etc... Podría decir que tenía algo de teoría pero me había estancado en la práctica. 

 Entonces... llegó el encierro de primavera 2020... 

Uno de las cosas que me puse a hacer fue revisar el estado de cuenta de mi Afore y con la calculadora de pensión de la Consar (en el momento de escribir este post, está deshabilitada porque se hicieron algunas modificaciones en la ley de pensiones a finales del año 2020). Después de evaluar mi situación, me di cuenta de que si no hacía algo de inmediato podría terminar mis días con problemas financieros graves (mi pesadilla es terminar empacando bolsas en el HEB).

Con esta visión en mente, me decidí poner manos a la obra y me determiné a realizar las siguientes acciones: 

1.- Lo que no se puede medir no se puede mejorar

Uno de los consejos que dan la mayoría de los autores de libros de finanzas personales es: 

Lleva un presupuesto y registra tus gastos. 

Para mí, la parte que me abrió los ojos fue la segunda. Aunque ya había intentado llevar un registro de mis gastos, no había tenido éxito. 

Como recomienda Ramit Sethi en "I will teach you to be rich" , la automatización nos hará libres. Después de investigar acerca de algunas aplicaciones que llevan el registro semiautomático (tienes que terminar de categorizar correctamente los gastos) de todas las transacciones comencé a utilizar Finerio y Fintonic. Al estarlas utilizando por las primeras dos semanas, me vino una revelación: 
¡El banco se estaba quedando con un chingo de mi dinero! Me dio muchísimo coraje conmigo mismo porque yo había permitido y propiciado a que esto sucediera. 

Imagina que el día que te perdiste el festival de invierno de tu hijo/a porque tuviste que hacer una visita de ventas que al final no se concretó, las horas que te peleaste con tu jefe porque alguien no hizo su chamba y te cargaron todo el pedo a ti... esas horas generaron algo de ingreso, ¡por eso lo hacemos!  (sí, sí, ya sé que hay quienes aman su trabajo y la madre, pero la mayoría de las personas trabajamos para poder ganar dinero y vivir en este mundo injusto y material). 

Pues yo me imaginé que el dinero que me gané por sudar y sacar sangre ¡se lo quedó el banco! ¡todo ese esfuerzo para que alguien más lo disfrute!

No habría tenido esa epifanía si no hubiera estudiado conscientemente los movimientos de mis tarjetas de crédito a través de las aplicaciones mencionadas arriba. 

2.- Priorizar mis gastos

Yo tuve una niñez espectacular y muchísimas oportunidades gracias a mis papás. No sería ni una milésima de lo que soy si no fuera por ellos. 

En mi mundo, el poder darle las oportunidades a mi hijo que mis padres me dieron es una meta en la vida. 

Por lo tanto, ya que empecé a ver en qué se iba mi dinero, pude empezar a priorizar: Sí, echarme unas cheves con mis compas está muy chido, pero prefiero invertir para la educación de mi pequeñuelo... 

Desafortunadamente, no se puede tener todo en la vida, por lo menos no con lo que gano en mi trabajo, por lo tanto, hay que priorizar. 

Seguir usando la tarjeta de crédito para mantener un estilo de vida que no corresponde a mis ingresos me va a dejar sin lograr lo que realmente me importa. 

Por su puesto, no todo en la vida son metas a largo plazo, por ejemplo, sigo con mi cuenta de Spotify pero cerré mi cuenta de YouTube Premium, sigo con Amazon Prime pero cerré mi cuenta de Netflix. 

Cada quién sabe en qué se quiere gastar su dinero, pero lo que me está funcionando es hacer las decisiones con plena consciencia.

3.- Dejar de regalarle el dinero al banco... 

Una vez que vi en lo que estaba gastando mi dinero y definí lo que me realmente me importa, pude destinar mayores recursos al pago de mis deudas. 

No hay ningún instrumento de inversión que te vaya  a dar más rendimiento de tu dinero que pagar tus deudas de tarjeta de crédito. 

Qué hice yo específicamente: 

Primero: Dejé de comprar cosas que nada más se me antojaban, dejar de adquirir deuda pues. 

Segundo: Busqué otro crédito para pagar una deuda más cara. Es decir, si estaba pagando mi tarjeta de crédito con una tasa de interés del 60% conseguí uno con una tasa del 20%. Con esto logré consolidar mi deuda para hacerla más barata. P.D. El crédito no debe tener penalidad por pago anticipado. 

Tercero: Le eché ganas para designar más recursos para pagarlo antes del plazo con el que contraté la deuda. ¿cómo? pues apretándome el pantalón y destinando un buen trancazo de mis utilidades y de mi aguinaldo. 

Con esto terminé con las deudas que no me dejaban dormir y ya no le estoy regalando tanto dinero al banco. Ya que estoy limpio, ahora lo importante es mantenerme así. 

4.- Invertir no es tan difícil como se escucha

Que el Bitcoin, Ethereum, Forex, Trading, etc... todo eso es inversión. 

Pero yo no tengo ni el tiempo ni las ganas de estar todo el tiempo pegado en la computadora viendo qué acciones estar comprando. Según lo que dicen varios autores de libros de inversiones, esto no es lo mejor para invertir. Yo simplemente digo que es apostar y especular. Yo no voy a apostar con el fondo de la universidad de mi hijo, ni en las vegas ni en la bolsa. 

Sin embargo, sí hay maneras sencillas de invertir. 

Yo hice tres cosas: 

Abrí mi cuenta de cetes directo y compro cetes a 28 días. 
Abrí mi cuenta en GBM Plus y compro ETFs de Vanguard.
Compré un seguro de vida que funciona como PPR. 

Con esas tres me siento confiado con mis inversiones. No me voy a hacer rico de la noche a la mañana, pero  empiezo a ver cómo lo que voy destinando a generar mi patrimonio va creciendo poco a poco. 

Esto de las inversiones es un mundo y hay mucho  de qué platicar. Pero si quieres hacer algo de lo que estoy comentando te recomiendo Comprar tu seguro de vida con propiedades de PPR (Plan Personal de Retiro) y abrir tu cuenta de Cetes. 

En cuanto vayas liquidando tu deuda, vas a poder invertir más y vas a ver cómo crece y crece tu cuenta. Esto a mí me motiva para seguirle. 

Conclusión.

De mucho corazón deseo que pongas en orden tus finanzas mi estimado lector. Sea eso lo que signifique para ti, pero el poder dormir sabiendo que vas por el camino que quieres no tiene precio.

¿te ha parecido útil alguno de los puntos mencionados? 

Me encantaría escuchar de ti. 

¡Un abrazo!

El Abuelo

No hay comentarios: